Jamón Gran Reserva procedente de la extremidad posterior de cerdos blancos, alimentados exclusivamente con cereales naturales y criados al aire libre, alcanzando más de 150 kg. Su escaso contenido en sal hace que nuestro jamón necesite de una curación mínima entre 24 y 26 meses en nuestros secaderos y bodegas naturales, para conseguir el gusto agradable y fino típico de La Prudencia.